En el párpado pueden aparecer tumores benignos y malignos que se originan en los distintos estratos de la piel y los anexos cutáneos (glándulas sebáceas, sudoríparas y folículos pilosos).
Los tumores benignos
Acrocordón, fibroepitelioma, queratosis seborreica, chalazión, quiste de inclusión, hidrocistoma, siringoma, nevo, entre otros. Si no se extirpan de manera completa (biopsia escisional) deben controlarse. Esto se debe a que un 2-5% de las veces que pensamos que son lesiones benignas, en realidad son malignas.
Hidrocistoma
Nevo
Queratosis seborreica
Tumores malignos
El tumor maligno más frecuente es el carcinoma basocelular (+ 90% de los casos). Los pacientes consultan por una lesión que altera la arquitectura normal del párpado (no permite que crezcan las pestañas), sangra y hace costras, a veces se cae y vuelve a aparecer. Se asocia principalmente a la exposición solar, y los pacientes con piel muy clara o tabaquistas tienen más chance de tenerlos. Si bien estas lesiones son muy características, siempre realizamos una biopsia incisional (extirpamos un pedacito del tumor) para confirmar el diagnóstico. Con la confirmación, sacamos el tumor en su totalidad y para eso, un patólogo debe controlarlo durante la cirugía. Finalmente, se reconstruye el párpado. Hay varias técnicas quirúrgicas y su elección dependerá de las extensión del tumor.
Carcinoma basocelular
Carcinoma basocelular